Como si no bastara el desmedido acoso policial y haber sido declarada culpable por el delito de calumnias, Kalúa Salazar, jefa de prensa de radio La Costeñísima, podría ser sentenciada a 300 días multas si una juez local de Bluefields da curso a la petición de la parte acusadora vinculada al partido sandinista en Nicaragua.
Salazar fue declarada culpable por el delito de calumnias el 23 de septiembre del 2020 y sentenciada a 120 días multa (7,684.58 córdobas), sin embargo la parte acusadora ahora pide que la sentencia sea de 300 días multas.
La sentencia final será dictada dentro de 10 días.
“Se celebró una audiencia especial para debatir sobre los agravios presentados. En el caso de nosotros presentamos un escrito y ahora se hizo la audiencia y que de forma oral se debía expresar en qué consistían esos agravios que le causó la sentencia condenatoria, la cual, dictada por la Juez Local Penal de esta ciudad, condenó a mi representada a una pena de días multa”, dijo Roberto Funes, abogado defensor de Salazar.
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Por otro lado, la defensa de Salazar argumentó que no hay delito para que se solicite o se aplique dicha multa.
“Nos oponemos a que se cumpla esta sentencia puesto que ella no cometió ese delito el cual se le pretende imputar. La parte acusadora reclama el montón de la multa que se le aplique a mi defendida”, manifestó el abogado defensor.

Los hechos
La denuncia en contra de Salazar fue realizada por extrabajadoras de la alcaldía sandinista de El Rama, Región Autónoma de la Costa Caribe Sur. Las supuestas afectadas argumentaron “ser víctimas” del delito de calumnia, luego de que se difundiera una denuncia en la radio titulada “Se destapa Corrupción en la Alcaldía del Municipio El Rama”, el pasado 04 de agosto de 2020.
“Quieren mandar un mensaje a través de la represión a los periodistas por hacer únicamente nuestro trabajo, todo mundo sabe que esto inició a través de una denuncia ciudadana”, declaró Salazar.
Asimismo, expresó que este caso dio un giro político y que “lo único que hice fue abrirle el micrófono al poblador que necesitaba hacer esta denuncia pública”.
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Acoso policial constante
Salazar informó que es víctima de acoso constante de parte de la policía. “Son visitas diarias que yo recibo de la patrulla que llega a las afueras de mi casa encienden las sirenas, comienzan a hablar, a gritar, a hacer bulla (…) están tan al tanto de mi familia, de mis horarios de entrada, de salida que hasta saben los nombres de mis hijas”, comentó al salir de la audiencia especial de apelación a la sentencia inicial.
De hecho, mientras brindaba declaraciones sobre la audiencia a una periodista local, una patrulla policial asediaba a los comunicadores independientes. Pero no es la primera vez: desde el inicio del juicio la periodista ha reportado más de 50 acciones de asedio, persecución y amenazas de la sancionada fuerza policial.