Escribe poesía, le encanta la historia, la edición audiovisual y para poder estudiar periodismo tuvo que desafiar a su padre y trabajar para costearse la carrera. Hablamos de Jennifer Ortiz, periodista y directora del portal digital Nicaragua Investiga.
Esta profesional de las comunicaciones afirma con certeza que cada persona “tiene que aprender a defender lo que quiere, porque cuando uno lo acepta, los demás se ven obligados a aceptarlo”.
Ortiz relata que su papá los había “programado” mentalmente (a ella y sus hermanos), diciéndoles que él quería que todos estudiaran medicina. “Crecí con esa idea, sin saber exactamente si era lo que realmente quería”, refiere Ortiz.
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“Cuando yo estaba en el cuarto y quinto año de secundaria, un profesor habló conmigo, me dijo que él miraba que yo tenía más vocación para una carrera social y me habló de historia o de periodismo”, cuenta Ortiz y agrega que son las dos áreas que más le gustan y que no se había dado cuenta.

Cercanía con el oficio
Advierte que en ese momento no entendía muy bien qué era periodismo. Investigó y le gustó mucho.
“Era lo que yo hacía, yo escribía, yo contaba historias. (…). De hecho, en la secundaria hicimos un periódico para reunir fondos para nuestra bachillerato y yo era como la editora en jefe, por decirlo de alguna forma. Y a mí me gustó mucho todo lo que implicaba hacer ese periódico”.
Jennifer asegura que desde ese momento asumió que eso era lo que quería ser en la vida.
“Desafié a mi papá. Mi papá se puso muy molesto cuando yo decidí estudiar periodismo. Me dijo que esa carrera no tenía muy buena remuneración económica. En eso no se equivocó”, refiere entre risas.
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Pero también le dijo que cualquiera podía ser periodista “y yo creo que no, en realidad el periodismo es una vocación y no es para cualquiera”, advierte con seguridad.
“Me acuerdo que él me dijo que no me iba a pagar mis estudios porque no miraba que el periodismo fuera una carrera seria. Yo me pagué mis estudios desde que inicié”, afirma orgullosa.
Un padre orgulloso
Ortiz cuenta que su padre ya la aceptó como periodista y que el día que logró su primer trabajo en el viejo Canal 8, en el tiempo que su dueño era Carlos Briceño, él fue por todo el barrio contando sobre su hija era periodista.
“Yo crecí en un barrio humilde, en el que hay mucha pobreza. Nosotros pasamos muchas limitaciones. A veces no tenía ni para ir a la universidad. No tenía para el pasaje”, recuerda.
Según Jennifer, cuando entró al Canal 8, no dijo nada en casa, solamente asistió a trabajar.
“De primas a primera me pusieron a hacer notas y cuando yo llego a la casa les dije vengan, quiero que vean este noticiero encendí el televisor y de pronto estaba ahí mi voz y mi nombre”.
Asegura que después de eso su padre se mostraba muy orgulloso de ella.

Administrar, escribir y motivar
Al preguntarle cuál ha sido el mayor reto en tu carrera, Jennifer responde sin titubear que ha sido emprender.
“Por que cuando uno trabaja para una empresa bien establecida otros son los propietarios y no te enteras de muchas cosas. Básicamente tu preocupación principal es cumplir con una asignación que se te da, pero cuando vos sos el propietario del medio de comunicación, tenés múltiples tareas y preocupaciones”, señala.
Ortiz confiesa que al frente de Nicaragua Investiga ha aprendido a hacer un poco de contabilidad, de administración y hasta de motivación personal. “Yo creo que emprender saca de vos lo mejor. Saca de vos todas las habilidades posibles, porque a veces vos mismo te pone barreras y no crees que vas a poder o que te parece demasiado desafiante”.
Advierte que asumir esta responsabilidad fue para ella una tarea súper retadora y desafiante.
“Pero las asumí y cuando uno termina, aunque termines exhaustas, te das cuenta que finalmente saliste mejor persona, nació una mejor versión de vos luego de haber decidido asumir una tarea que sabés se te iba a retar”.
Nicaragua Investiga nació al calor de abril
La periodista, nacida el 15 de febrero de 1986, comenta que Nicaragua Investiga surgió después de tres o cuatro años de haber dejado el periodismo de calle o reportería, tiempo en el que se había dedicado a la realización de documentales.
“Cuando estalló la crisis de abril, por casualidad o porque no hay otra forma, nosotros pasábamos por algún lugar y había algo interesante. Y tu instinto periodístico sale… y utilicé las redes sociales para cubrir, para reportar lo que estaba sucediendo en el momento mis redes como Jennifer Ortiz y empezó a tener mucha visualizaciones”, rememora.
Asegura que posteriormente llegaron las amenazas y la persecución política de los sandinistas, por lo que decidió salir del país y crear un proyecto que fuera un poco más clandestino, que no se supiera quién estaba detrás “porque entendimos que era muy riesgoso”.
“Y así surgió Nicaragua Investiga antes de irnos, del país. Pero eso ya no nos funcionó, porque ya como Jennifer Ortiz estaba recibiendo amenazas. Desde Costa Rica nos sentimos con más libertad de decir, somos nosotros los que hacemos Nicaragua Investiga, nos asombró mucho la aceptación que obtuvo, el crecimiento acelerado que tuvo”.
El trabajo actual
Según Ortiz, el inicio fue lo más desafiante, porque, sólo habían tres personas trabajando. Y de esas tres todas trabajaban medio tiempo en otros lugares para obtener recursos.
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“Yo subsidiada el proyecto porque yo tenía un trabajo por aparte, y con ese dinero que se supone debía ser para mi familia pagaba personal, pagaba la web, etcétera. Y éramos tres. Hace poco crecimos, ahorita estábamos cinco, éramos un poco más hace algunos meses, pero nosotros lo que hacemos es que somos elásticos le llamo yo al equipo”, indica Jennifer.
Explica que el equipo crece o se contrae dependiendo de cómo está el ingreso.

Periodismo extremadamente valiente
La periodista asegura que para ella es muy difícil hacer una valoración del trabajo que hacen los periodistas independientes en el país, “porque cada uno tiene un valor excepcional y cada uno se esfuerza en su manera de llegar a públicos diferentes y hace un esfuerzo inmenso considerando las circunstancias y el contexto de censura”.
“Yo entiendo que todos estamos haciendo lo mejor que podemos desde nuestras propias posibilidades, circunstancias y realidades, pero yo creo que el periodismo independiente ha sido extremadamente valiente”, afirma con aplomo.
Lamenta que los periodistas tengan que enfrentarse a situaciones inimaginables como correr de grupos de paramilitares, hacer cobertura entre barricadas y no firmar notas para proteger la identidad.
Jennifer enfatiza que “esas cosas tan inverosímiles no pasan en un país democrático y te habla de que el que sigue ejerciendo sencillamente tiene demasiado valor para continuar”.
La periodista añade que respeta a quienes han decidido retirarse porque entienden que es algo que ellos no quieren asumir, pero, advierte, que se debe reconocer a quienes continúan en la lucha de informar día a día lo que ocurre en Nicaragua.
Periodismo con las reglas básicas
Ortiz reflexiona que en Nicaragua ha sido un reto enorme tratar de encontrar caminos para seguir informando. “Hemos visto las realidades de Cuba y Venezuela y sabemos que nosotros nos dirigimos allá, que ya avanzamos bastante y que va a llegar un momento en que solo se va a hacer periodismo desde el exilio, como se hace en Cuba”, expresa.
Apunta que mientras llega ese momento, desde Nicaragua Investiga han decidido hacer periodismo con las reglas básicas, con las reglas profesionales que dicta la carrera, el balance y el contraste.
“El gobierno muchas veces no quiere dar su versión, pero ya eso es un asunto que ellos decidieron. Nosotros buscamos los medios oficialistas para siempre decirle a la gente lo que está diciendo el gobierno porque es parte de lo que se nos exige como periodista”, expone Ortiz.
Uno se debe a la audiencia
Añade que para ella la clave del periodismo independiente es hacer el trabajo de manera profesional, con rigor y exactitud.
Un llamado a retomar la ética
“Y te lo digo porque desde 2007, Daniel Ortega empezó a comprar medios de comunicación y con los medios increíblemente compró a los periodista, (…) tristemente las conciencias son mercancías, tienen precio y cuando vos ves eso, te das cuenta de que hay muchos periodistas que tristemente aportaron a que Nicaragua llegara a lo que es hoy”, lamentó.
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Sueña con una Nicaragua en desarrollo
“Lo que nos detiene es que hemos estado viviendo en un país que tiene ciclos repetitivos, que vive en guerra, conflicto, confrontación, que no prioriza la educación, que tiene un bajo índice de desarrollo social y humano y eso nos detiene tiene a todos”, enfatiza.
