El fact-checking o verificación de datos es un ejercicio clave para combatir la desinformación desde el periodismo.
Ello es como una respuesta al alto flujo de noticias falsas, en los últimos años han surgido diversos medios de comunicación especializados en fact-checking.
En Latinoamérica hay algunos referentes como Chequeado, Salud con lupa y Colombia check.
Los medios dedicados al fact-checking tienen igual importancia que los medios tradicionales, pues son una respuesta inmediata ante la proliferación de desinformación.
En 2022 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), publicó “Una guía para principiantes para establecer una organización de fact-checking en América Latina y el Caribe”.
Si te interesa iniciar tu propio espacio contra la desinformación, aquí tienes algunos consejos planteados en la guía elaborada por Chequeado y Unesco.
1. Tu foco
El primer paso es definir “qué es lo que se va a chequear y con qué enfoque”, pues la desinformación está en distintitos sectores. Hay información engañosa sobre política, salud, economía, educación y otros temas más, por lo tanto, se debe tener claro qué se va a verificar, señala la guía.
Además, hay múltiples formatos y canales para la desinformación, por esto hay que elegir la temática y formato del que se hará la verificación.
Se puede hacer fact-checking sobre podcast, videos, publicaciones en redes sociales, discursos de políticos, entre otros.
De la misma manera, según la finalidad del medio y conociendo el público meta, se definen los canales para difundir la verificación.
Esto significa que el equipo del medio tiene que conocer a su audiencia, “saber qué les interesa, cómo se informan y cuál es su acceso a distintas tecnologías o redes”, detalla el documento de Unesco.
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2. Tu equipo
Tener un equipo especializado en la comprobación de datos es fundamental, sin embargo, lo ideal es integrar a profesionales de otras áreas y así dar respuesta a todas las necesidades que conlleva manejar un medio comunicación, explica la guía.
Un equipo completo debe contar con personal encargado de producir y difundir el contenido a través de diversos medios y formatos. Por otra parte, en el área administrativa es fundamental una persona responsable de la búsqueda y administración de fondos.
Este punto es clave, pues según el documento, “muchas veces los fundadores de pequeños medios de la región son periodistas que no son especialistas ni en armado de equipos ni mucho menos en gerenciamiento de organizaciones y financiamiento”.
El cumplimiento de este punto está sujeto al tamaño y apoyo económico que pueda tener un medio emergente.
3. Los fondos
Contar con un fondo económico es básico para sostener un medio de comunicación, generalmente los medios aplican a financiamiento de organizaciones internacionales.
Antes de aplicar a apoyo económico, hay que definir el tipo de organización que se está creando. Los organismos siguen mecanismos distintos para solicitar fondos, esto depende de si son con o sin fines de lucro .
De hecho, la guía explica que el apoyo internacional no es la única forma de generar ingresos, pues se puede apostar por otras formas de generar dinero, como vender servicios, crear membresías, hacer capacitaciones o crowdfunding.
4. Transparencia y credibilidad
La guía de Unesco y Chequeado describe a una organización de fact-checking, como “apartidaria, equilibrada, transparente” y que además sea “percibida como tal”.
Para lograr esto, sugiere seguir tres elementos planteados en el Código de Principios de la Red Internacional de Verificación de Hechos IFCN.
- La transparencia económica de poder decir cómo se financia el medio.
- La transparencia del equipo, publicar quiénes son las personas que forman parte de la organización (obviamente, entendiendo la excepción en aquellos casos de países en los que corre peligro la vida de periodistas).
- La transparencia de las fuentes y del método de verificación que se siga en cada caso y un proceso de corrección o rectificación en caso de que haya algún error.
En este último punto, el documento explica que debe haber un método de verificación definido y que es importante que este sea “propio y publicado”.
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5. Certificación IFCN
Estar acreditado por la Red Internacional de Verificación de Hechos (IFCN), ayuda a crear confianza y dar credibilidad a tu medio. Por otra parte, ser parte de IFCN permite aplicar a “proyectos o fondos específicos”.
Para optar a la certificación, se debe cumplir con el Código de Principios establecido por IFCN, entre los que destacan:
- Un compromiso con el no partidismo y la equidad.
- Un compromiso con la transparencia de fuentes.
- Un compromiso con la transparencia del financiamiento y de la organización.
- Un compromiso con la transparencia de la metodología.
- Un compromiso con correcciones abiertas y honestas.
Además, la guía de Unesco explica que para aplicar a esta certificación, hay requisitos a cumplir, como el pago 200 dólares anuales y tener al menos 26 verificaciones publicadas en los últimos seis meses.
Puedes ver otros requerimientos en una guía creada por IFCN para las organizaciones que quieran aplicar.
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6. Alianzas
El documento elaborado por Chequeado señala que, “aliarse y colaborar sirve para llegar a nuevas audiencias, producir más y mejorar nuestro trabajo e impacto”.
Según lo planteado, las alianzas pueden ser con otros medios de fact-checking, con medios de comunicación que no son de especializados en verificación e incluso con organizaciones independientes que tengan intereses similares al medio.
Por otra parte, es recomendable que en las alianzas quede “claro cuál es el rol y responsabilidad de cada medio aliado”.
7. Difusión en redes
El documento apunta que, en las redes sociales la desinformación suele tener mayor alcance e impacto que la verificación, por lo tanto, aconseja verificar de forma rápida y presentar la información de la manera más clara posible.
En ese sentido, también hay que cuidar el título, el orden en que se ubica la información y las imágenes utilizadas.
Para obtener más datos sobre cómo presentar correctamente una verificación, te recomendamos leer la guía “Síntesis: las principales lecciones para los verificadores de datos, vacíos y nuevas direcciones para la investigación sobre desinformación”, elaborada por África Check, Chequeado y Full Fact.