“Desgrabar” o transcribir entrevistas de audio y video a texto, es una de los procesos más complicados en cualquier proceso periodístico.
Aunque existen periodistas que prefieren una larga entrevista para tener más elementos que utilizar en sus trabajos, muchas veces, las fuentes utilizan todo ese tiempo para dar un mismo mensaje de diferentes formas.
En este artículo de Literal Periodismo Ciudadano, queremos mostrarte un poco cómo identificar reiteraciones en las entrevistas y algunos tips para que la transcripción sea una experiencia menos engorrosa.
Primero que nada, en lenguaje periodístico se le llama “desgrabar” al proceso de transcripción de una entrevista o de un evento registrado en audio o video.
En muchas ocasiones, luego de una conferencia de prensa, todo lo que exponen los protagonistas es transcrito y enviado a las salas de redacción.
Literal Periodismo Ciudadano: Ceshia Ubau: «abril me devolvió un sentido de vida»

Identifica a tu entrevistado antes de desgrabar entrevistas
“Lo peor que me ha sucedido es desgrabar una entrevista de más de una hora. Es cierto que no transcribís todo, pero invertís muchas horas en estar escuchando toda la entrevista, detener, escribir y luego avanzar para escuchar si hay elementos importantes”, señaló Luis Arvizú, quien dirigió la revista “Zona Escolar”.
Primeramente se debe identificar qué tipo de entrevistado se requerirá en la pieza periodística.
Arvizú comenta que si bien en su revista se utilizaban pocas entrevistas (más que todo testimoniales), identificó al menos tres tipos de entrevistados: los cortantes, los mesurados y los de larga duración.
Entrevistados cortantes
Los entrevistados cortantes son aquellos que suelen responder con monosílabos o con frases demasiado cortas, compuestas por unas cuantas palabras.
A estos se les debe solicitar extenderse un poco más o considerar repetir la pregunta.
Con estos entrevistados funcionan preguntas como: “¿Qué considera usted?” “¿Qué sintió usted al observar…?”,”¿Cómo podría mejorarse esta situación?”.
Es decir, preguntas que invoquen más percepciones personales, opinión o que simplemente rompan el hielo.
“Entre los entrevistados cortantes encontrás a los que son así por pena, o a los que ven con inferioridad a los periodistas y al resto de personas”, señala Arvizú.
Literal Periodismo Ciudadano: Dilemas éticos al hacer entrevistas periodísticas

Entrevistados mesurados
Son aquellos que cuentan con más conocimientos sobre el manejo de los medios de comunicación, tienen mucha familiaridad con los mismos y por ende, saben que las respuestas precisas y concisas son de gran ayuda para los periodistas.
Estos entrevistados se limitan a brindar una opinión o un análisis sobre un tema determinado sin caer en la parte anecdótica.
“Me considero un entrevistado mesurado”, expresa Arvizú.
Entrevistados de larga duración:
Se dice muchas veces que “más es mejor”. Sin embargo, desgrabar una entrevista kilométrica no es buena idea, sobre todo, con la rapidez de las nuevas plataformas y tecnologías.
Estos entrevistados mezclan anécdotas con análisis y datos.
Si bien es bueno que las audiencias conozcan un poco sobre el entrevistado, es un error transcribir y dejar en texto ideas inconclusas, ya que estas fuentes, generalmente interrumpen las ideas para explicar con anécdotas.
“De una entrevista de veinte minutos, a lo mejor, podés sacar tres párrafos con este tipo de fuentes. Para trabajos demasiado complejos, como investigaciones, hay que abordarlos para conocer el contexto o antecedentes de un suceso o como fuentes previas, para tener un norte sobre posibles preguntas futuras, pero no para citarlos; Haría ruido”.
Luis Arvizú
Literal Periodismo Ciudadano: Del béisbol a la fotografía: síntesis de la vida de Germán Miranda

Otros trucos
El comunicador añade que una buena técnica es conversar previamente con el entrevistado, para que de esta forma, “libere” todas las anécdotas fuera de grabación y que al pasar a la entrevista grabada, se limite a responder con base en análisis o conocimientos.
“Al desgrabar las entrevistas, tendrás más elementos en texto y menos material desechado en audio”, explicó.
Apunta palabras claves, minutaje o mensajes importantes
“Es buena idea ir apuntando los mensajes más importantes y, si es posible, el minuto en el que están. Cuando llegás a la redacción, simplemente buscás esos minutos y transcribís. El problema es cuando no sabés los mensajes claves y tampoco sabés donde están ubicados en la grabación”, aconseja Arvizú.
Apuntar en una libreta los mensajes claves y el minutaje es una buena opción que te liberará de una inversión de tiempo adicional en la redacción.
Además, existen dispositivos móviles y grabadoras que permiten crear “marcas de agua” durante la grabación, que son una especie de señaladores para que el periodista pueda ubicarse posteriormente.
Literal Periodismo Ciudadano: Michelle Polanco y su recorrido por la televisión nicaragüense

Conversa previamente con el entrevistado
Cualquier tipo de los entrevistados mencionados anteriormente, pueden ser tratados previo a la entrevista. Por ejemplo, al cortante se le puede invitar a romper el hielo o saciar su espíritu de superioridad con una buena conversación previa. Y al de larga duración se le puede convencer para que sea lo más exacto posible, e incluso, practicar las respuestas.
“Casi siempre digo que cuando hacés una entrevista, ganás o perdés una fuente. Si la ganás con una buena entrevista está bien, pero la conversación que no queda grabada, muchas veces es la que cuenta y la que genera confianza en la fuente para que pueda apoyarte en posteriores ocasiones”, señaló Arvizú.
No debes desgrabar todo en las entrevistas
No es necesario que desgrabes todo, solamente lo más importante. Pasar todo un día desgrabando implicará una inversión de tiempo adicional para seleccionar el texto a utilizar.
“Yo empiezo desgrabando lo más importante. Aquellos elementos secundarios que no incluyen, me sirven para escribir los textos que unen a las citas”, señala Arvizú.

Aprende a utilizar estas herramientas para desgrabar
Finalmente, te recomendamos algunas herramientas para desgrabar entrevistas o charlas extensas:
- Amberscript: Es un software de transcripción de audio profesional e inteligente. Aunque tiene una versión de pago, la versión gratuita ofrece hasta 40 minutos de transcripción.
- Amazon Text to Speech: Es una herramienta de la empresa Amazon que permite crear analíticas sobre los audios y llevar un control de “clientes” a través de las llamadas telefónicas.
Descript: La versión gratuita tiene un límite de 3 horas. Aunque no es tan exacta en español, brinda grandes comodidades en inglés.
Literal Periodismo Ciudadano: Efrén Mejía, un sacerdote en TikTok
- Happy Scribe: Permite elegir entre subir un archivo multimedia o pegar un enlace de YouTube. Una vez hecho, empieza a reproducirse podemos empezar las transcripciones.
- Text from Speech: no necesita descarga ni instalación ni registro y funciona en varios idiomas. Lo que nos permite es muy básico: basta con ir hablando para transcribir el audio o vídeo y puedes guardar el texto, copiarlo, llevarlo a Word o incluso imprimirlo desde la propia web.
- Dictaction: Si tu fuente habla demasiado rápido, lo ideal es utilizar dictation. No obstante, la fuente debe estar bastante cerca del micrófono.