La comunicación oral en definitiva, ha pasado a ser vista como un elemento fundamental tanto del aprendizaje como del trabajo, y por eso dar charlas, exposiciones o conferencias es el modo habitual de demostrar que se tiene soltura en ese dominio.
Es por ello que en Literal te brindamos 10 consejos para mejorar tu capacidad oratoria al hablar en público según la psicóloga con especialidad Clínica, Sonia Castro.

1. Apréndete las ideas, no el texto
A la hora de preparar el contenido de la charla que vas a dar, una buena manera de no caer en un nerviosismo extremo es descartar, desde el principio, la posibilidad de aprenderte literalmente todo el guion que has escrito.
En vez de eso, lee una y otra vez el texto y acuérdate de la idea que das a entender en cada línea.
De Literal: 8 libros sobre gramática y periodismo de Álex Grijelmo que te pueden interesar
2. Sinceridad
Intenta trasmitir tu discurso a tus oyentes de una manera natural y con toda la sinceridad del mundo (como si de un amigo íntimo se tratara). Y es que no engancharás ni atraparás la atención de nadie si te muestras diferente a como eres, te notan sobreactuado y poco natural. Muéstrate siempre sincero.
Lo que importa es ser auténtico y cercano, los asistentes buscan esa intimidad con los ponentes.
3. Emplea palabras sencillas en tus párrafos.
Uno de los objetivos de hacer ponencias, es que vos tengás rápidamente la atención de la gente. Una forma eficaz de hacerlo es empleando en tus párrafos palabras sencillas y fáciles de entender.
También, esta técnica que va a ayudar más rápido las ideas que querés abordar y te evitará silencios incomodos por no acordarte de una palabra rebuscada.
4. Organización
Es fundamental que lo que querás trasmitir, independientemente de lo largo o corto que sea el discurso, esté muy bien organizado. Lo normal es hacerlo por puntos: introducción, elementos centrales y conclusiones.

5. Respira y relájate
Los nervios son malos compañeros de viaje antes de hablar en público. Así que tómate unos minutos previos a la exposición para hacer varias respiraciones profundas y oxigenarte bien. Para relajarte, sólo tienes que mover el diafragma suave y rítmicamente y dar inhalaciones largas y profundas.
6. Gesticula para facilitarte la expresividad
Esta recomendación tiene que ver con no utilizar los gestos de los brazos y las manos como una impostura al hablar, sino como una manera de potenciar la expresividad.
Lo anterior debido a que, realizar movimientos con las manos que sean coherentes con el tono y la musicalidad de tu manera de hablar, además de dar pistas visuales del significado de lo que estás diciendo, vuelve más fácil hablar de una manera más expresiva. Esto dará una sensación de apertura al público y por ello, provocará confianza.
Lea tambén: El legado de la escritora y periodista Oriana Falacci
7. No temas a los silencios
Quedarse sin hablar durante un tiempo no es malo en sí, es algo que incluso en el caso de ser consecuencia por habernos quedado en blanco, puede ser disimulado.
Por eso, prepárate un pequeño plan acerca de lo que debés hacer si en cierta ocasión te cuesta un poco recordar cuál es lo siguiente que tenés que decir: beber de un botellín de agua, mostrar una expresión de reflexión, etc. Algo tan sencillo como eso nos aporta mayor seguridad en nosotros mismos.
8. Sé consciente de tu lenguaje no verbal
No podemos pasar por alto todos los gestos y movimientos que hacemos, ni las inflexiones de la voz, las muletillas, el parpadeo, la velocidad, la sonrisa nerviosa.
Para ser conscientes de cómo es nuestro lenguaje no verbal cuando comunicamos algo, nada mejor que grabarnos en vídeo para después poder verlo. De esta forma observaremos detenidamente nuestras cosas a mejorar al hablar en público y nos ayudará a desenvolvernos con mayor seguridad las próximas veces.
Un ejemplo de ello puede ser caminar y desplazarse lentamente de un extremo a otro del escenario y es que no sólo hay que prestar atención a las personas ubicadas únicamente en el centro de la grada o de la sala, no, todo el público es exactamente igual de importante.

9. Cuida tu imagen
La imagen dice muchísimo de vos, ¿por qué? porque eleva la percepción de valía y la autoridad, y porque también otorga distintividad y confianza.
Y aunque es importante que elijás tu vestimenta según el tipo de evento en el que expondrás, hay reglas básicas de las que no te puedes olvidar a la hora de hablar en público: ropa no arrugada, zapatos limpios, colores combinados, manos cuidadas, imagen aseada.
Le puede interesar: Aplicaciones para enviar archivos multimedia con la mejor calidad
10. Final potente
Es importante que el final de tu discurso y las últimas conclusiones a exponer sean potentes y contundentes y es que debido al “efecto de recencia”, famoso en psicología el final es lo que después mejor se recuerda.
Un buen final puede ser cerrar con una frase o con una pregunta para reforzar el mensaje que has dejado en la audiencia.